viernes, 23 de abril de 2010

Cómo quisiera abandonarme en tus brazos


Las cosas no siempre suceden como pensamos, o mejor dicho rara vez estamos en situaciones ante las que no tenemos nada que hacer.

Estoy buscando alternativas, he ido al que llaman "el gurú de los naturistas en España", que también es médico y lo único que puedo decir es que fue sincero. Apenas se molestó más que en ponerme una dieta vegetariana, darme un librito suyo donde me dijo que me podría servir de orientación y poco más. Viendo que la visita era inútil aproveché para sacar el tema de mi alergia al polen, al menos ahí sí que tendría opinión. Esto me recuerda que tengo una amiga que me define como "tremendamente práctica", como muestra un botón.

No sé si realmente pensaba así o es que no quiso meterse en el camino del otro médico.

Me han hablado de una mujer que "ve" más allá, pensando en si alguien me ha echado mal de ojo o algo así, pero no ha habido forma de quedar con ella, nunca tenía tiempo, y cuando lo tiene... soy yo la que me paro a pensar en qué narices hago yendo a verla cuando no me inspiran mucha confianza este tipo de personas.

Podría contar más cosas que han salido mal pero sólo demostraría mi grado de frustración y desesperación actual, así que paso.

Esto me lleva a pensar lo difícil, si no imposible que me supone dejarme en manos de un médico, no tener el control de las cosas que me pasan. Si de algo me está valiendo toda esta experiencia es para conocerme más, es como un curso práctico acelerado en unas cuantas sesiones intensivas.

Siempre he sido creyente, practicante, pero de un tiempo (largo) a esta parte hasta Dios se me ha caído al suelo y lo que sí que puedo asegurar es la diferencia de vivir sintiéndole a tu lado y fiándote de él, a vivir sin saber qué es para tí, sabiendo que está ahí pero dejándolo a las puertas de tu vida.

Ahora estoy así, sóla, muy acompañada pero con una soledad profunda que no sé cómo solucionar y es que quizás deba empezar a fiarme y a dejarme en las manos de un desconocido, el médico, en los brazos de Dios que siempre me sostuvieron, y por fin relajarme y empezar a disfrutar un poco.

viernes, 16 de abril de 2010

Primer paso


Aconsejada por mi compañera de habitación de hospital, que era terapeuta familiar, me estoy leyendo "los hombres son de Marte y las mujeres de Venus". Pensé que era el típico libro de risa fácil pero me equivoqué.

Es mi primer paso para intentar arreglar muuuuchas cosas que van mal y que hoy no puedo apenas hablar. La verdad es que aunque era muy esceptica con el libro puedo decir que describe al 90% situaciones de casa. Mi forma de pensar, la forma de actuar de él. Lo único que intento es entender...

Por alguna razón todo lo que entiendo soy capaz de aceptarlo y realmente me gustaría entender y ver si así las cosas mejoran aunque sólo sean un poquito.

Algo ya van mejorando, pasito a pasito, pero estamos aún tan lejos...

Mi segundo paso va a ser disfrutar de cada día de la baja como si fueran vacaciones, aunque evidentemente físicamente no es posible pero sí que pienso relajarme y regalarme cosas, sencillas, como una música bonita, una buena película en la tele, un café con las amigas, o dos, o tres o los que hagan falta. Voy a tratar de tocar el piano cada día, a ver si comienzo no sólo a mejorar técnica sino a expresar, que creo que me falta plasmar mis sentimientos en las teclas.

Mi tercer paso, tener al menos un pensamiento positivo cada día. Imaginarme dentro de un año, tocando mi cicatríz en la tripa y sonriendo, pensando en que todo pasó, sin miedo.

Mi cuarto paso, cuidar mi salud física (la mental está en todo lo anterior), comer sano, recuperarme, caminar los días que pueda.

Mi quinto paso dar las gracias por la vida cada día, creo que cada circunstancia lleva su parte positiva, de todo se aprende (conociéndome no lo podré hacer si hay días muy duros, pero los días mejores lo haré).

Y bueno reconocer que no tengo cáncer ni nada parecido y que puede parecer por estos post que tengo algo terminal y no es así ni mucho menos. Mea culpa si a alguien le ha podido dar esa sensación, por eso lo aclaro también.

miércoles, 14 de abril de 2010

Cosas que siempre quise hacer


Si echo la vista atrás hay un sueño que siempre he deseado y me ha parecido inalcanzable.

Ver una aurora boreal.

Sí, ya lo sé, soy un poco rarita, y más si os digo que es un sueño que tengo desde que era pequeña y coleccionaba unas fichas de animales, vegetales, minerales y fenómenos atmosféricos, y he de decir que la aurora boreal me cautivó desde el principio.

Si he de ser sincera creo que poco a poco he perdido las ilusiones por muchas cosas y simplemente me he dejado llevar por el día a día. Hoy no tengo una ilusión por algo concreto y tangible.

Y es curioso porque a pesar de desear con todas mis fuerzas ver la aurora boreal nunca he hecho nada para lograrlo. He puesto excusas tipo "es un viaje caro", "no se pueden predecir donde o cuando ocurrirán exactamente"... Llegué a ver hace años información acerca de viajes que prometían ver una, pero ni siquiera llegué a interesarme de verdad. Y hoy me pregunto si tengo derecho a decir que no cumplí mis sueños cuando no hice nada por obtenerlos.

Mi ahora actual es complicado. La lesión que tenía y por la que me operaron el día de San José se ha repetido, el pronóstico a corto plazo es otra operación, mis temores más terribles se están haciendo realidad.

Yo que pasé por la primera operación y consideré que al final fue provechosa para mi vida me encuentro con que quizá quedaron cosas pendientes que no aprendí y son necesarias que aprenda. Pero también me encuentro de nuevo con dudas respecto al futuro, respecto al pasado, a mi forma de vivir, de afrontar los problemas, a mi forma de morir. No quiero pasarme de trascendental pero es que quizás hay momentos en los que nos tenemos que plantear muchas cosas y yo estoy pasando por uno de esos.

Creo que una de las cosas que haré cuando salga de todo esto, porque "sé" que saldré es replantearme mis sueños y volver a soñar, volver a emocionarme, tratar de alcanzarlos si creo que de verdad los deseo y no desanimarme si no lo consigo.

Un objetivo real, pasar más tiempo y de más calidad con mis hijos, dejar lo superfluo atrás, las excusas a un lado, priorizar lo verdaderamente importante.

Dejarme empapar por la lluvia (de verano a ser posible que tampoco quiero una pulmonía), oler las flores, saborear un té en una cafetería caprichosa, aceptar aquello o a aquellos que me encantaría cambiar pero no soy quien para hacerlo, relativizar las cosas...

Y eso sí, si los sueños se truncan porque el destino así lo tiene preparado que no me busquen en la tierra como un alma en pena porque no me voy a quedar aquí a sufrir por lo que ya no tengo, que me busquen en el cielo, en el infierno o donde me corresponda porque cada uno debe seguir su camino por duro que sea y mi vida no se acaba aquí.
 
El blog de Francesca. Design by Exotic Mommie. Illustraion By DaPino